miércoles, abril 29, 2009

El tiempo se repite


El Cometa 1956- H Arend-Roland, "Pascua"

Parece que fuera ayer, pero ya han pasado 52 años. Ya hace cincuenta y dos años justos que como explicaba en otro articulo de este blog, mi abuelo me sacó a la puerta de mi casa, a la sazón en el popular barrio del Cerro del Águila de Sevilla, y me enseñó el cometa Pascua, que flotaba en el cielo con una belleza desconocida para mí y que fué el anzuelo para quedar enganchado desde entonces a esta bella y maravillosa ciencia que es la Astronomía. Pero sobre todo, y como persona de ciudad, a la Astronomía Urbana; que aunque la modernidad de nuestras urbes, con sus luminarias muchas veces inútiles y perjudiciales nos ha hecho perder, aún como en la foto de la Luna besandose con las Pléyades del post anterior, se puede conseguir plasmar la belleza celestial del momento mágico que nos hace acercarnos a compreder el misterio de la creación.
He estado visitando la hemeroteca municipal y he encontrado reseñas de la aparición y visita del 1956-H Arend-Roland, por otro nombre "Pascua", en todos los periodicos de la época; y he puesto una noticia de ABC del 30 de Abril de 1957, en la cual se les explica a los sevillanos que para verlo habia que ponerse de espaldas - por esta vez- al Prado de San Sebastian, o sea la Feria, y mirar hacia San Jerónimo, al Noroeste. También y cogida de un libro de Asimov, titulado El Cometa Halley, he puesto una foto del cometa con su vistosa cola y fina anticola. Aunque yo, personalmente lo recuerdo mas hermoso y grande, porque ya se sabe que cuando uno es pequeño todo le parece enorme y magnífico.
Ahora es 30 de Abril. Ahora es Pascua Florida. Ahora es la Feria. Ahora parece que fué ayer, y el espejo del tiempo retrata en su medida lo que queda del niño que un día fuí.

lunes, abril 27, 2009

Luna de Abril


En este mes de Abril en que se cumplen cincuenta y dos años que por estas fechas ví al cometa "Pascua", he tenido la suerte de meter entre los pixeles de la memoria de mi cámara digital una conjunción preciosa: La Luna y Las Pléyades van de la mano por el prado medio nublado de un cielo, de Abril tambien pero otro siglo, que evoca la próxima tormenta. En Abril, aguas mil; dice el refran, y esperemos que esto siga ocurriendo durante muchos años. La madre Natura sabe en sus arcanos cuando el trigo necesita el agua refrescante que lo dora con la ayuda del sol, y no en vano condiciona la vida de todo ser viviente. Desde aquí tengo un sosegado recuerdo hacia mi abuelo Pepe, que desde donde esté seguro que seguirá "barruntando" el tiempo, como buen hombre de campo, para saber con certeza cuando tiene que plantar la sementera. Gracias abuelo por iniciarme en esta bella ciencia.