domingo, julio 03, 2022

LA  AVENTURA  DE  MARTE



Uno de los planetas más enigmáticos para el observador ciudadano, seguramente será Marte. Y el motivo no es otro que desde siempre (y cuando decimos  “desde siempre”, efectivamente eso queremos decir), desde que los primitivos griegos lo hicieran dios de la guerra y lo llamaran  Ares, e incluso le buscaran un antagonista:  Antares, o rival de Ares (alfa de Escorpión),  su color rojizo ha despertado curiosidad  en cualquier observador, aunque dicho observador fuera casual y no le interesara para nada el estudio de la Astronomía, sobre todo si ha podido contemplarlo en sus máximos  acercamientos a la Tierra.

Otro de los motivos, y esto ya es especulando con la fantasía humana, es la creencia de vida en su superficie. De hecho, cuando se han escrito novelas o relatos de posibles visitas de extraterrestres o alienígenas, casi siempre el mundo de procedencia de los mismos era Marte. Ha habido aventureros de ficción como Diego Valor, Flash Gordon, el Capitán Marvell y otros, que su lucha más principal era impedir que los marcianos, procedentes de un planeta en “decadencia” colonizaran la Tierra y nos convirtieran en sus esclavos, o en el peor de los casos nos exterminaran.  

¿Quién de nosotros no recuerda haber visto alguna vez una reproducción de la pintura rupestre del Gran Dios Marciano en el desierto de Kalahari?  E incluso todos recordamos como un programa de radio de H.G.Wells en los E.E.U.U., dio de cosecha a multitud de personas con traumas de ansiedad y miedo de por vida, e incluso otras se suicidaron, pensando que lo que trasmitía la radio en directo, era una realidad y los marcianos pronto tomarían la Casa Blanca. 

Seguramente muchos de los lectores que esto leyeren, conocerán la provincia de Huelva, amplia región que empieza al sur de Extremadura y muere en los brazos de la Mar Océana que decía el Almirante; pues bien, en un terreno de dicha provincia andaluza, en las orillas del Rio Tinto, la E.S.A y la N.A.S.A, las dos empresas culpables del gran y magnifico avance de la aventura espacial, tienen su “MARTE” particular. En un suelo inhóspito para la vida que normalmente se conoce en cualquier lugar de nuestro planeta, viven unas criaturas, que en sus distintas especies desarrollan su ciclo vital. Son los llamados EXTREMÓFILOS por la ciencia oficial. O sea, organismos vivos, que no necesitan los mismos aditamentos que nosotros para sobrevivir, que son capaces de desarrollarse en las ácidas orillas del río que debe su nombre a las minas de Tharsis y Riotinto, que también, mira por dónde, griegos y romanos empezaron a explotar allende los tiempos.




El Planeta Marte hace 14 años