Poco a poco
Foto 1: Telescopio Sky Watcher 120 mm. R, sobre montura Celestrón CG-4 motorizada y columna metálicaFoto 2: Primera prueba de fotografía, la estrella Epsilon Lyrae, la doble-doble, a partir de un Avi efectuado con una Philips toucam Pro, capturado con Selene y sumado con Registax.
Poco a poco. Así titulo esta nueva entrada en el blog. Poco a poco.
Y el porqué de este título no es otro, que valorar el esfuerzo cotidiano para la consecución de un fin.
A lo largo de mi vida, una de las ilusiones mas grandes que albergaba era la de que un día iba a ser capaz de ser feliz, inmensamente feliz, solo con mirar la grandeza suprema del cielo. De abarcar con una sola mirada la magia de poder comprender el secreto supremo de la Creación que para muchos de los mortales compañeros de circunstancias en este viaje pasa completamente inadvertido. Y gracias a Dios creo que lo he conseguido.
No es un observatorio de cúpula, ni de techo corredizo, es simplemente un observatorio ciudadano de balcón, donde un telescopio comprado de segunda mano, es el rey de la calle sobre una montura amarrada a una columna metálica regalada por un amigo. Pero tiene una cosa importante: Es mi ventana al mundo exterior. Al espacio lejano que me rodea. A la idea creativa que intenté comprender desde siempre. Mi nexo terreno con la felicidad. Mi querida y ansiada libertad.
Y el porqué de este título no es otro, que valorar el esfuerzo cotidiano para la consecución de un fin.
A lo largo de mi vida, una de las ilusiones mas grandes que albergaba era la de que un día iba a ser capaz de ser feliz, inmensamente feliz, solo con mirar la grandeza suprema del cielo. De abarcar con una sola mirada la magia de poder comprender el secreto supremo de la Creación que para muchos de los mortales compañeros de circunstancias en este viaje pasa completamente inadvertido. Y gracias a Dios creo que lo he conseguido.
No es un observatorio de cúpula, ni de techo corredizo, es simplemente un observatorio ciudadano de balcón, donde un telescopio comprado de segunda mano, es el rey de la calle sobre una montura amarrada a una columna metálica regalada por un amigo. Pero tiene una cosa importante: Es mi ventana al mundo exterior. Al espacio lejano que me rodea. A la idea creativa que intenté comprender desde siempre. Mi nexo terreno con la felicidad. Mi querida y ansiada libertad.
posted by Pepe Gómez @ 11:33 p. m.
3 comments
3 Comments:
Preciosa esa doble doble, hay que ver lo puntuales que han salido.
Efectivamente Pepe, poco a poco se nos abre esa pequeña pero a la vez inmensa ventana al exterior de un mundo maravillo, al exterior de esa porción tan pequeñita de Universo que hace que nos sintamos rebosantes de felicidad. Cada vez que se abre un postigo de esa ventana y percibimos la pobre luz que con tanta dificultad nos llega de tan lejos, nuestro cuerpo experimenta unas sensaciones únicas.
La leche, tu relato me ha hecho sentir melancolía.
No todo el mundo podría presumir de tener una ventana al Universo en casa :) , aunque lo mejor de todo, es que su observatorio ciudadano no está hecho para presumir, sino para observar y contemplar las estrellas, que son dos cosas distintas.
Enhorabuena por su trabajo.
Sinceramente muy bueno FELICITACIONES ADELANTE
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