domingo, febrero 04, 2007

Fotografia Planetaria



En anteriores post, he comentado lo que para mí ha supuesto encontrar una herramienta como la webcam para llevar a cabo una de mis grandes ilusiones: capturar imágenes que nunca soñé que podria meter en una película fotográfica. La fotografia analógica de planetas, como las ceremonias iniciáticas, tenia un rito; un aprendizaje profundo, un cuidado exquisito, tanto en la elección de las películas, como en el revelado y tratamiento de las mismas, saber que tiempo de exposición era necesario, que abertura. Preparar el equipo para un seguimiento exacto, cuidar que el motorcillo que hacia el mismo no fallara en el momento oportuno, que la cámara, si no era totalmente mecánica, tuviera las pilas a punto. Y despues. . . Clic
Y las ondas luminosas herian el lecho de suaves sales de plata que iban grabando en su seno la imagen latente de la Luna, de Saturno, de Jupiter, o tal vez de nuestra querida nebulosa de Orión. Hasta aquí todo bien. Yo he tenido muchas noches placenteras de fotografía tanto lunares como planetarias y de cielo profundo, que despues se han ido al garete por la inexactitud de un revelado improcedente, o el capricho colorista del empleado de la tienda fotográfica donde he llevado mi preciosa carga. Muchas horas de trabajo perdido por un mal corte del negativo, por ejemplo, o porque las "quimicas" no estaban en su punto mas idoneo.
Pero esto, se acabó. Una pequeña cámara webcam, un programa de captura y un ordenador, son suficientes para ver en tiempo real que está "pasando" en la futura fotografía, cuya base es un simple Avi de video, que tratado con un programa de registro y aplilamiento de imágenes hará el milagro de tener en un solo fotograma el planeta, la nebulosa o ese crater de la Luna que siempre nos llenó de intriga y que ahora tenemos delante, y comprobamos que esos puntitos que veiamos al telescopio, son otros cratercillos tan pequeños, que solo la fotografía nos podia desvelar.
Sin duda un gran avance, y quiero desde aquí animar a que lo prueben.
Pero no por ello, voy a dejar de usar mi vieja y querida Pentax, o mi Canon EOS 300, o mi Seagüll de medio formato. Eso sí, yo haré los revelados de mis películas, como ultimamente haciamos mi hijo y yo. Y preferentemente usaré diapositivas, que como todos sabemos conllevan un tratamiento totalmente automático y estan a salvo de manipulaciones e ingerencias no deseadas.